Ave zancuda inconfundible, de hasta 110 cm. Mucho más fácil de observar que su pariente la Cigüeña negra. Es acompañante frecuente en buena parte de los pueblos de la comarca, elemento intrínseco de todas las iglesias de la zona. En época de cría es muy abundante. A pesar de estar considerada estival, en buena parte de Extremadura y en la comarca Sierra de Montanchez y Tamuja, podemos disfrutar también con su presencia en invierno. En esta zona, los inviernos son más aceptables para esta especie al sur de la comarca, en torno a Almoharín y sus regadíos de la cuenca del Guadiana. En Extremadura está considerada de interés especial.