La encina es el árbol más característico e importante de la Iberia mediterránea. En nuestra Comarca podemos encontrarlo tanto como especie principal de las dehesas, como formando parte junto con otras especies de árboles y arbustos del bosque mediterráneo.

La encina es un árbol robusto, de copa amplia y redondeada, que no suele sobrepasar los 15 metros de altura. El tronco es derecho, con una corteza cenicienta y resquebrajada en grietas poco profundas, y suele ramificarse en tres o cuatro grandes ramas muy abiertas. La encina es perenne y sus gruesas hojas, de color verde grisáceo, varían entre formas redondas y lanceoladas, con un número variable de dientes en sus bordes.

La forma más habitual de encontrar este árbol en la Comarca es en la dehesa, el ecosistema mediterráneo por excelencia del suroeste ibérico, fruto de la mano del hombre, que ha aclarado el bosque mediterráneo original para beneficiarse de sus pastos para el ganado, la bellota para el cerdo, leña y carbón para uso doméstico, la caza… creando un paisaje único de alto valor ecológico y etnológico.

En la Comarca contamos con dos monumentales encinas declaradas Árboles Singulares, son la encina Terrona, en Zarza de Montánchez, considerada como la más grande de España y a la que se atribuyen 800 años de edad, y la encina La Nieta en el término de Torre de Santa María, con unos 18 metros de altura y un perímetro de tronco de 5 metros.