Este municipio, que perteneció a la Orden de Santiago, tiene restos arqueológicos de todos los tiempos, destacando un Hospital de Peregrinos junto a la vieja calzada que hoy es cordel de ganados y que ayer comunicaba Mérida con Trujillo y Toledo, por donde el 2 de Marzo de 1526 Carlos V viajaba parando a pernoctar en dicho Hospital.
Este municipio está en los confines de la Orden de Santiago frente a los territorios de la truxilense en Ruanes y Robledillo; en el Castillejo podemos notar los restos de un viejo castro prerromano que aún está sin excavar, así como un Fortín de la Edad del Hierro en el interior del municipio, donde aún se conservan los muros norte y sur. También nos encontramos en los alrededores del pueblo con tumbas antropormóficas excavadas en roca granítica. Al recorrer sus calles, es difícil mirar sin encontrarnos estelas funerarias o epigrafía romana fundiéndose con elementos constructivos de las casas. De época medieval encontramos el Puente del León y el Puente Mocho sobre el río Tamuja.
La parroquia dedicada al Apóstol Santiago, estilo barroco (siglo XVI_XVII), comparte el patronazgo local con Nuestra Señora de la Estrella de estilo barroco popular (siglos XVI-XVIII), residente en propia ermita y donde el Lunes de Pascua hacen romería, la sacan fuera celebrando misa para volverla al templo en solemne procesión antes de iniciar la comida y la fiesta, con el juego de la Pica y demás jolgorios que aguantan hasta el anochecer.