La vida de esta localidad ha estado desde la antigüedad en más de quince piedras que se movían sin cesar en la llamada Garganta de los Molinos, algunas de tiempos romanos. Estos molinos, integrados plenamente en el paísaje, suponen una atractiva ruta de senderimo a lo largo del arroyo del mismo nombre, acompañado de indudables valores patrimoniales, ambientales y paisajísticos, que el visitante no debe obviar en los recorridos a pié que ofrece la Sierra de Montánchez.
Arroyomolinos, en estos parajes, vivió en 1811 la derrota de las tropas napoleónicas del general Girard por el general inglés Hill. Su iglesia parroquial está dedicada a Nuestra Señora de la Consolación, en la que reluce una hermosa portada plateresca. Como curiosidad, en esta iglesia está la Virgen de la Leche, de la que se dice que cuando amamanta al niño tocan sus instrumentos dos querubines.
También contamos en esta población con la Ermita de San Sebastián, de estilo renacentista (siglo XVI). Merece la pena destacar un recinto fortificado de la Edad del Bronce denominado "Morra del Pajar"; que aunque se encuentra aún sin excavar, aparecen algunos restos en la superficie.
En cuanto a festejos populares, vecinos y visitantes disfrutan de los que son ofrecidos a sus patronos: El 15 de Agosto en honor de Nuestra Señora de La Consolación, y el Domingo siguiente al 20 de Enero en honor a San Sebastián.